VUELO
Teniendo
en cuenta cuán alto volamos,
tú no
eres el mayor de mis problemas:
la
gravedad ahora me reclama,
y tú
eres ninfa material apenas.
Yo no
soy mullido, ligero, peso
distraído.
No. Mi figura es cierta,
no como
la tuya, que te das aires
de burbuja
de jabón, de marquesa
o de
saliva en mis labios feroces.
¡Cómo
diferimos! En apariencia,
en
edad, en condición, en talento.
Tú
espumada, volátil, pizpireta;
yo
galeón, roca, configurado,
yo,
para indisimular mi presencia.
Ambos
en acto de volar estamos,
en tus
dominios más que en mis maneras,
en
aérea lisonja de estos cuerpos
que nos
dio la madre naturaleza
para
disfrutarnos, para gozarnos
como
gusta la victoria el atleta.
No
eres, pues, el mayor de mis problemas.
De
momento, ni siquiera un problema.
Que
estos vienen después de horas de vuelo,
después
de tres o cuatro o cinco vueltas
de
reconocimiento tamizado
por
sobre nuestras ascuas virulentas.
Volemos
una vez más, paloma,
sobre
especies, matices, diferencias…
Mientras
la disputa —que ha de llegar—
llega y
no llega, despliega tu vela,
despliegue
yo la mía: que volemos
conjuntadamente,
como cometas.
Tú
grácil y ágil jinete del viento.
Yo
rápido resorte mientras vuelas.
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by tx1sk0
'Poemas Instantáneos'
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